Escribanos y agua

 Por Juan Manuel Valladares Expósito  (Comunicación en Radio Muelle el 8 de mayo de 2024)

 
DESDE  EL  GÉNESIS  HASTA  HOY 
 
 
          El agua, cosa tan seria que hasta la bendicen y con ella pretendemos lavar nuestros pecados, dará siempre para muchos estudios y trabajos pero como es el caso del que esto escribe no basta con dar una opinión personal que poco aclarará cuando poco sobre ella se sabe. 
 
           Pero, ¿y si vamos con seriedad, a sacar a relucir escritos de toda índole, obra de escribanos públicos en su mayoría, que dieron con sus anotaciones toda clase de certezas sobre lo que ocurría en el mundo del agua de Tenerife en el siglo XVI? Con esa visión del documento antiguo, transcrito en su totalidad con la firma de nuestros maestros en la ciencia de poner en letras y expresiones actuales las anotaciones de pasados siglos, tendremos la ocasión de vivir de cerca que fue la realidad del mundo del agua en el siglo XVI. 
 
          No vamos a insistir una vez más en Acuerdos del Cabildo en ese siglo inicial de la presencia europea en Tenerife, porque aspiramos a que no sea una visión gubernamental pero si  una visión entre hombres que viven en la isla y comparten inquietudes propias de todo ser humano que pretende alimentar a su familia. 
 
          El listado puede ser tedioso y por ello habrá que renunciar a una extensa lista de escribanos públicos para concretarlos en los que creemos mas próximos al tema. Breve listado que limitaremos a 
 
               Ruiz de Berlanga-       1507-1508 
               Hernán Guerra-           1508-1510 
               Juan Márquez-            1518-1521 
              Bernardino Justiniano-1526-1527 
              Extracto de Protocolos de Los Realejos de 1521 a 1561. 
 
          Creemos que es una muestra suficiente para conocer qué importancia va a tener el agua para los pobladores de la isla de Tenerife en ese siglo. 
 
          Ruiz de Berlanga. Un trabajo de la calidad a la que siempre nos tuvo acostumbrados doña Manuela Marrero Rodríguez, desgraciadamente ya fallecida. Trabajo publicado en el año 1974. Doña Manuela nos aclara que este escribano no es un capricho del Adelantado, tan dado a nombrar fieles a su persona, sino que el nombramiento viene de la mano de los Reyes Isabel y Fernando en 30 de abril de 1506, cargo que se hizo efectivo en 1507. La reina Juana en 1509 le nombraría escribano en la isla de La Palma. 
 
          Pero entremos en el agua tal y como aparece en sus documentos donde figuran personas de curiosos pero necesarios oficios. Las citas siempre con el mayor respeto a doña Manuela Marrero.
 
          4 de mayo de 1507. Ruy Jiménez de Becerril, v0 ., vende a Pero Hernández, cerrajero, unas casas que tiene en la calle de Santa María, lindantes con casas de Juan Gutiérrez, sacador de aguas, con casas que fueron de Juan de Benavente y con la calle real. 
 
          Un oficio  sacador de aguas que ya se va haciendo necesario para el abastecimiento agrícola y ganadero. Y la mencionada calle de Santa Maria en 1514   sería luego la calle de La  Carrera 
     
El agua como parte de la herramienta industrial. 
 
          4 de junio de 1507. Francisco Florencia, mercader, est., da a renta durante 1 año y medio a Pedro de Gomendio, vizcaíno, v0 . de La Orotava, una sierra de agua para aserrar madera, que posee en nombre de Rafael Fonte, mercader, v0 . de Cádiz. La sierra está colocada en el agua que viene a La Orotava, en su comienzo, en el pinar. 
 
El agua como elemento del desarrollo de la vida en  poblaciones 
 
          29 de julio de 1507. Rodrigo Alonso, v0 . de La Orotava, vende a Pedro de Azpeitia, vizcaíno, v0 ., unas casas con las paredes de dos tapias de altura, que tiene en La Orotava, lindantes con casas de Martín de Gomendio, vizcaíno, con la calle que va a la montada y con el acequia del agua que pasa por la calle real. 
 
          Del agua y sus diversos usos estaríamos hablando largamente en la escribanía de este citado Ruiz de Berlanga. 
 
          Vayamos a otros tal que Hernán  Guerra 1508-1510. Nuevamente de doña Manuela Marrero y la presencia de doña Emma González Yanes. Obra de 1958. Una curiosidad que citan  las autoras, 6 ó 7 escribanos para La Laguna del principio del siglo XV y dos para La Laguna de 1958. Y aclarar que este Guerra es el sobrino de Lope Fernández. 
 
          Y para que sigamos conociendo las historias familiares  este Hernando Esteban Guerra le arrendó en 2 de octubre de 1536 a Andrés de Valladares una sementera y un buey llamado “Herguido”  en una sementera en Tacoronte próxima al Sauzal (Protocolos del escribano Hernán Gonzalez). Pero solo nos interesa el agua. 
 
          Y aparece uno de tantos agravios que cometió el Adelantado contra su vecinos. 
 
          26 de agosto de 1508. Francisco de Ayora, Juan Estévenes y Francisco Romero, vs. del Realejo, por sí mismos y en nombre de todos los vecinos del Realejo de Taoro, ausentes, dan poder especial a Antón de Ortega, pr., para que entienda en cierto pleito que tratan en Residencia contra el Sr. Adelantado, ante el Gobernador Lope de Sosa, sobre razón del agua que les tomó el Adelantado a los dichos vecinos del Realejo.- 
 
 Cuando el agua no se usa hay que buscar quien lo haga. 
 
           28 de noviembre de 1508. Jaime Joven, vecino dice que por un albalá del Adelantado le correspondió en repartimiento la tercera parte de las aguas del río y barranco de Tabzo, en esta isla. Como desde entonces no ha sacado ningún provecho de esta agua ni piensa sacarlo, por estar lejos de poblado y resultar muy costoso edificar allí, y como Francisco Jiménez dice que ha comprado o quiere comprar cierta • parte del agua del dicho barranco a las otras personas que la obtuvieron en repartimiento, él le cede y traspasa la suya para que haga de ella lo que quiera.-
 
           Seguiremos con los que nos diga el escribano Juan Márquez de la mano de doña María Padrón Mesa publicados en 1993.Se referirán a los años 1518-1521. Escribano, aunque nombrado en Tenerife, fue confirmado bajo el reinado de Doña Juana y su hijo el Emperador Carlos. Para tan corto de tiempo en su escribanía usó la palabra agua en mas de 20 ocasiones.
 
          22 de abril de 1522, Franco de Negrón, mercader genovés, est., por sí y por Silvestre Pinelo, est., y Juan Pacho, vº., dicen que Jordán Báez, Esteban Báez, su hijo, y Catalina de Frías, mujer de Jordán Báez, vendieron a Juan de Vergara, vº. de La Orotava, unas tierras de pan llevar, sitas en Icod el Alto, que dicen de los Trigos, que fueron de Juan Fernández de Barcelos, que están en 2 pedazos, uno de los cuales linda con tierras que fueron de Pedro Mayor, con un barranco en medio, y con el barranco del agua de Jorge Grimón.
 
          20 de abril de 1519.  Jordán Báez, Esteban Báez, su hijo, y Catalina de Frías, mujer de Jordán Báez, vs., ella con licencia de su marido, venden a Juan de Vergara, vº. de La Orotava, presente, los bienes y heredamientos siguientes. También le venden un parral, viña y arboleda, con toda el agua que le pertenece y con un asiento de casa, con más todas las tierras que hoy día están puestas de cañaverales. 
 
          Como anécdota señalar que en una data del 30 de diciembre de 1514 figura un Juan de Vergara junto a Bernardo Escarlati. Descubrimiento que alguien tardó poco para darlo como el músico Domenico Scarlati napolitano nacido en 1685. Patriotismo, ¡pero caramba sin pasarse ! 
 
          14 de febrero de 1520. Bartolomé de Milán, vº., da a renta a Alonso Báez y a Alonso Rodríguez, vs., presentes, una huerta de árboles, hortalizas y otras legumbres, sita en la laguna de esta villa, cercada con su cerca de sauces y zarzas, por tiempo de 3 años a partir del día de San Miguel próximo pasado de 1518 en cuanto al suelo de la huerta, y en cuanto a los árboles y agua comienza el arrendamiento el 1 º• de noviembre de 1518. 
 
          Solo algunos ejemplos para ver como el agua ya es tan moneda de cambio como la propia tierra y puede ser arrendada a los que inicialmente no son sus dueños. 
 
          Una presencia de los protocolos de Bernardino Justiniano de los años 1526 a 1527 obra de doña Delfina Galván Alonso año 1990. Destacar la nota genealógica adjunta al trabajo sobre este Bernardino Justiniano,acido en Genova.Ya hay citas en 1506 a un hermano suyo, Tomás, vecino de Tenerife desde 1506, aunque debe de ser el mismo Tomás que en 1504 es dueño de aguas o tierras en Güimar. El llamado Bernardino, el escribano ya aparece en 1514. Aquí lo dejamos o acabamos en la Casa Lercaro injustamente llamada así a mi juicio. 
 
          Veamos que dice en su escribanía sobre el agua. Un bien tan necesario aparece en más de 40 ocasiones en  sus  escrituras.
 
          Documento archivado con el numeral 1.569. Hernando Esteban Guerra dona al bachiller Diego de Funes la mitad del agua que saliere y sacare de sus tierras, con el cargo de que Funes saque el agua a su costa y haga acequias para llevarla hasta las tierras que la quisieren a renta y con otras condiciones. 
 
          Luego ya comerciamos con el agua. Anotar que este Diego de Funes fue nuestro primer medico desde 1515, con contrato de 20.000 marevedies anuales. 
 
          4 de enero de 1526. Ibone Fernández, v.0 , vende a Simón de Morales, v.0 presente, una suerte de tierra con el agua que le pertenece por sus dulas, sita en Taganana, lindante con el arroyo del agua, con tierras de Fernando de lbaute y con la acequia del agua. El precio de la venta es de 40 doblas de oro castellanas que son 20.000 mrs. de esta mda. de Canarias que lbone declara haber recibido. 
 
          Una escritura referente a doña Elvira Diaz mujer de Pedro de Lugo ya difunto. Digamos en honor a la verdad que este Pedro de Lugo Bahamonde no es hijo del Adelantado Fernández de Lugo. La duda existe porque su padre se llamo igualmente Alonso Fernández de Lugo y su madre Isabel García Pradal. Casó con la judeoconversa Elvira Diaz. El Sr. Manuel Poggio Capote e igualmente don José Antonio Cebrían Latasa  nos han dado cumplido informe sobre la personalidad de una hija suya conocida como Isabel de Lugo Bahamonde, esposa de Cristóbal de Valcarcel. Fue llamada en su vida la Ricahembra. Sin pretender herir modernas cuestiones… ¿por su belleza o por su riqueza? 
 
          2 de abril de 1526. Arriendo a Domenico Rizo: …..Dña. Isabel, su hija, cuya mitad del ingenio es suya, las renueva, y lo que gastare en ello se lo descuenten a ella. Dña. Elvira se obliga a tomarlo en cuenta de la renta del postrero año de este arrendamiento. Le arrienda además todas las tierras de sequero y de riego que tiene en La Orotava y su término, las cuales son las mismas tierras que le cupieron por la partición de los bienes de Pedro de Lugo. Ella y su hija le arriendan todas las cañas que en las dichas tierras tiene, así de planta como de zoca y rezoca; le arrienda toda el agua que tiene y le pertenece en el río del valle de La Orotava según le cupo por la partición. 
 
          Un buen lugar para reconocer el apellido Socas tan usado en nuestra isla. 
 
          Y de una obra poco difundida en la actualidad, mal que atañe a buena parte de nuestra historia, daremos alguna cuenta. Su titulo Extracto de los Protocolos de los Realejos de los años 1521-1524-1529-1561 y una vez más la maravillosa pluma de aquella gran maestra del buen hacer que fue doña Manuela Marrero Rodríguez.1992. 
 
          En buena lógica como nos aclara doña Manuela en este trabajo el poblamiento desde los primeros años y la riqueza en aguas de alguna zona de Tenerife iba a crear una gran expansión. Y donde hay movimiento poblacional hay que legislar y llevar a la escribanía la verdad de cada ley o acuerdo entre partes. Así nacen estos protocolos en una zona tan fértil como Los Realejos. 
 
          Sera bueno saber que cuando el censo de 1531 La Laguna ya daba 5.179 personas, Abona daba 283, Güimar167 y la zona de Orotava, Realejo y Daute nada menos que 8.000. Creemos más que justificada la presencia del escribano en estos últimos lugares citados. 
 
          En una sociedad naciente se pueden encontrar curiosidades, y lo será la presencia en 1521, como posible primer escribano del Realejo de Taoro, de Segundo Piamontes, nombre que nos lleva a Italia. Algún día en otro trabajo hablaremos del lío que causó la muerte de este posible primer escribano y su sucesión en el cargo por Luis Velázquez en 1525. Señalar igualmente que a este escribano se debe la descripción de la portada de la Iglesia de Santiago Apostol en Los Realejos, pues así se refleja en escritura suya de  1521, noticia que conocemos gracias a la gran labor del Sr.  Lorenzo Santana Rodríguez. Pero hablemos del agua que es lo que nos ocupa. 
 
          En lugar tan favorable para la agricultura el agua se cita nada menos que en 40 ocasiones . 
 
          4 de diciembre de1521. Francisco de Mesa dice que está concertado con Rodrigo Senis, presente, para darle a partido el heredamiento de viña y arboleda que tiene en la Rambla de los Caballos, lindantes con tierras y cañaverales de los herederos de Hernando del Hoyo, por la parte de hacia Icod tierras suyas y por encima los riscos de Icod, con el agua que dentro nace. El tiempo de duración del contrato es de 9 años, 9 esquilmos, con obligación de podar y cavar por febrero de cada año, escardar, deshojar y armar la viña de horquetas, levantada cada año una vez; se regará continuamente con el agua de manera que no salga de la viña y se aproveche para otra cosa. Hay unas condiciones: Si Rodrigo no bonificare la heredad ... ; todos los días se ha de aprovechar el agua en el parral de manera que no se pierda agua alguna, salvo en el dicho parral y en lo lugares necesarios.
 
          11 de enero de 1530. Pero Bello, V. 0 de Tenerife, da a partido a Álvaro Hernández y a Pedro Yanes, trabajadores, una heredad que tiene a tributo de los herederos de Hernando del Hoyo, con su agua y con todo lo que le pertenece. El tiempo de duración del contrato es de 6 años a partir de la fecha. Hernández y Yanes han de adobar, podar, regar y dar las labores necesarias a la viña durante el tiempo estipulado, 6 años, 6 cosechas. El vino procedente de la viña se partirá hermanablemente, la mitad para Bello y la otra mitad para los 2 trabajadores, puesto a la bica. 
 
          Llamo la atención sobre la palabra bica que heredamos de nuestros primeros pobladores portugueses y que aun usamos como topónimo alterando su escritura y llamándolo Vica como tal situada en La Matanza de Acentejo. Con B o con V el vino es de la mejor calidad. Igualmente los mas viejos aun recordamos cuando en plan mimoso para adular a nuestras abuelas hacíamos con nuestra boca un gesto próximo al llanto que ellas llamaban bico.
 
          Si el Altísimo nos da salud seguiremos indagando en los papeles viejos que contienen la historia de nuestro pueblo canario...y digo historia, solo historia.
 
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